Té Chai Latte

¿Has probado alguna vez el té Chai hecho en casa? Es delicioso, y si no lo has hecho, hoy tienes la oportunidad de hacerlo con ésta receta sencilla.

El té Chai se ha convertido en uno de los tés de mi preferencia, porque no sé si sepas, pero me considero una adicta al té. Me encanta poder disfrutar de una taza de té por las mañanas, después de la comida y en la tarde mientras veo tv, edito videos o platico con alguien… es más, ahorita mismo estoy saboreando una taza de té.

Recuerdo que la primer vez que lo probé fue hace unos 5 año en Starbucks, y desde ese día me enamoré por completo de ese sabor de hierbas y especias.

Esta receta es muy sencilla, además de que la puedes ajustar a tu gusto, puedes agregarle más especias, puedes usar el tipo de leche que más te guste y/o endulzante de tu preferencia.

Esta receta es para que hagas un “concentrado”, es decir, para que lo tengas en el refrigerador y lo uses cuando quieras. Solo es cuestión de calentarlo y agregarle la leche. ¡Ah, pero claro, también o puedes tomar en frío!

Ingredientes:
(Para aprox. 2 litros de concentrado)

• 2 litros de agua
• 5 bolsas de té negro ó 2 cucharadas de té negro suelto
• 10 semillas de cardamomo
• 1 raja de canela
• 1 trozo mediano de jengibre, sin piel
• 5-7 pimientas gordas
• 2-3 estrellas de anís
• Leche de soya (mi favorita) o crema para café
• Azúcar morena para endulzar

Preparación:

Vas a poner a calentar la mitad del agua, cuando esté caliente, ponle el té negro y deja reposar por alrededor de 15 minutos.

Ahora pon el resto del agua en una olla pequeña a fuego medio. Cuando el agua comience a hervir, agrega el resto de los ingredientes, deja que hiervan por 5 minutos y apaga el fuego, deja reposar por 15 minutos. Endulza con azúcar, recuerda que debe de quedar bien azucarado porque le vas a agregar el té negro y la leche.

Ahora en una jarra o molde, mezcla el té negro y el té de las especias.

Para servir, pon el té caliente en una taza, agrega un poco de leche y ajusta el azúcar. 

Si gustas puedes espolvorearle un poco de canela molida encima.

¡Listo!